En un ámbito mundial en el que la economía crece a pasos agigantados y gran cantidad de empresas evolucionan hasta convertirse en inmensos paquetes industriales, es innegable la necesidad de contar con un inventario de activo fijo que cumpla con los estándares y las normas internacionales en tal sentido, como lo son las Normas Internacionales de Contabilidad (NIC) y las Normas Internacionales de Información Financiera (NIF), las que toman a su cargo áreas particulares del universo contable.
Dada esta situación especial, que va en constante aumento a medida que avanzan las tecnologías y se mueven mayores volúmenes de inversión, es preciso controlar el eficiente desempeño de las actividades financieras de toda empresa, por lo que tales normas, las NIC y las NIF, engloban una serie de regulaciones y procedimientos a cumplirse con la fundamental finalidad de asegurar ese correcto funcionamiento y transparencia financiera de lo que toda gran empresa en algún momento ha de enorgullecerse.
Inventario de activo fijo para acompasar el progreso
En este marco de cumplimiento de la norma financiera (NIF), por expresarlo en forma más fácil y accesible a todo tipo de público empresarial, como hacer un inventario de activo fijo es un detalle no menor en el proceso.
Sabido es que un inventario de activo fijo correctamente llevado a cabo pone a salvo a toda compañía de eventualidades de diversa índole, así como es un respaldo absoluto ante cualquier auditoria que se presente, en el momento que sea.
Un inventario de activo fijo es el medio de verificar, identificar y ubicar todos los bienes con los que la empresa cuenta para sus operaciones cotidianas. Permite corroborar las bases contables para abonar todo tipo de impuestos, así como pone en mano de los responsables el valor presente de la empresa. Ni qué hablar de que permite el cumplimiento de la norma financiera (NIF) y todos los estándares nacionales e internacionales de control contable y financiero existentes.
Información precisa del activo fijo
El inventario de activo fijo debe incluir información precisa y clara de todos los bienes existentes, aportando datos de vital importancia, que no por parecer obvios deben dejarse de lado. Esto incluye, por ejemplo, la descripción y ubicación física del activo y quiénes son los usuarios habituales o eventuales. También la marca, modelo y serie (en el caso de que se cuente con esos datos) del activo, imágenes gráficas, composición, código de barra, categorías y subcategorías (si existieran, para una mejor identificación).
Cumplir con la norma financiera (NIF)
Llevar adelante un inventario de activo fijo, identificando los bienes en su totalidad, permite mantener el cumplimiento de la norma financiera (NIF), en el marco de las Normas Internacionales de Contabilidad (NIC), sobre todo en lo que tiene que ver con la