Seguramente ya sabes lo que es un inventario de activos fijos, pues has escuchado muchas veces hablar sobre esto. Sin embargo, es importante que tengas en claro cuál es el propósito para que tengas en claro su importancia.
La importancia de realizar un inventario de activos fijos en tu empresa
El principal objetivo de un inventario de activos fijos es contar con información que los describa, para que cuando debas tomar alguna decisión empresarial, puedas conocer la situación real de estos.
Por eso debes recordar que efectuar un inventario de activos fijos, ya sea con tu propio personal o a través de los servicios de una empresa especializada, no es un detalle, algo que puedes hacer cuando te sobre el tiempo o el dinero.
Además, esta actividad debe basarse en un hondo saber del proceso de producción de la empresa, lo cual significa que no cualquier colaborador puede realizarla.
Para cumplir su propósito, el inventario debe describir el activo fijo, así como brindarte fechas de compra y mantenimiento. Como los activos son diferentes, puede cambiar el tipo de información que se brinde en este.
Si no cuentas con personal experimentado en la realización de un inventario de activos fijos, es recomendable la contratación de una empresa especializada. Recuerda que se requieren conocimientos particulares sobre esta actividad y que cada empresa es diferente, por lo que la manera de efectuar el inventario debe adaptarse a esta. En tanto el personal que efectúe la tarea debe ser capaz de realizar una correcta codificación de los datos del activo fijo.
¿Por qué efectuar un inventario de activos fijos en tu empresa?
Muchas empresas suelen ver la gestión del control de los activos fijos con el único propósito de combatir el fraude y cumplir con las obligaciones fiscales. Si bien es cierto que este es uno de sus objetivos, esto deja de lado otras de sus importantes funciones.
El inventario tiene la capacidad de maximizar el retorno sobre la inversión realizada en los activos fijos de la compañía. También evita inversiones innecesarias, pues se conoce el estado actual del activo y se adquieren nuevos solo si en realidad se necesitan.
Además, otorga un respaldo a la información relacionada con la realidad de la compañía para otros fines, como por ejemplo fusiones o escisiones. Y hace posible la adquisición de seguros que cubran todos los activos fijos. También un inventario puede responder a las exigencias de un banco a la hora de otorgar un préstamo.
Asimismo, hace posible comprobar las condiciones tanto técnicas como financieras para participar en licitaciones. También puede hacer posible la formación de una asociación temporal con otras empresas del mismo sector, sin que ninguna pierda su personalidad jurídica.
Y, por sobre todas las cosas, permite una mejor toma de decisiones. Conocer la realidad permite a los empresarios incluso modificar la óptica que tienen de sus propias empresas, lo que puede llevar a cambiar algunas decisiones importantes. No es poca cosa, ¿verdad?